La penultima vez que postee, comenté que me iba a mis merecidas vacaciones a mi casa. Bueno, ya he regresado, pero ahora, vamos a relatar un poco de la gran experiencia que tuve al regresar a casa.

Bueno, hago esto aparte, porque siento la necesida de contarles lo que es para mi regresar a casa.

Porque en realidad son dos regresos a casas.

Para empezar, no es como mis amigos que dicen "Voy de vacaciones a casa de mis padres", o algo así. Nop, para mi es regresar a mi CASA. Al hogar que me vio crecer por tantos años.

Y después está mi otra casa, la que he construido en Xalapa. Digo, despúés de cuatro años, la puedo llamar así. Mi propio espacio, mis propias reglas, mi propio mundo.

Y ahora vienen los regresos a casa.

Recuerdo perfectamente la primera vez que fui a mi casa (Tabasco) cuando ya estaba estudiando en Xalapa. Fue para el puente de Día de Muertos, que fue más o menos por ahí del 30 de Octubre. No habían pasado ni tres meses, y yo ya me moría por regresar. Y aunque esa visita sólo duró cinco días, fueron de los mejores días de aquél año.

Pero todo inicio tiene un final y tuvo que llegar el día en que regresaba a casa. Dios, sólo de recordar que estabamos en la central de camiones, mi mamá y mis tía Lupe y Leonor, y las cuatro llorando, ahora me da risa. No es burla, sino el recuerdo de aquel día. Justo antes de subirme al camión, el conductor me vio y me dio ánimos. Me dijo que era sólo el comienzo.

Creo que ahora entiendo bien esas palabras. En verdad que era el comienzo. La separación, cortar el cordón umbilical de la familia duele hasta las entrañas, pero después, el dolor ya no es tan fuerte.

Y además, siempre tenemos nuetro ritual de despedida. Después de subir al camión, y que este salga de la central, sé que la vuelta estarán esperando para darme el último saludo. Siempre compro boletos pegados a las ventanas y del lado derecho del camión. Y así, con una gran sonrisa, lágrimas en los ojos, y mi mano agitándose, me despido de la familia.

Después me acomodo en mi asiento, me coloco mis auriculares y me duermo, porque ahora, regreso a casa.